Si cada uno es de una manera y ha vivido su vida cómo ha querido, por qué no hacer lo mismo cuando el viaje ya ha terminado. Por qué pensar que a la hora de hacer un testamento sólo existe una modalidad, en vez de crear un documento único para cada persona.
Por poner un ejemplo, no es lo mismo que el fallecido sea un anciano con hijos independizados, a que sea una madre divorciada que tenía la tutela compartida, o por el contrario sea un padre viudo. La situación de cada persona es completamente distinta a la del resto de mundo, y por ello es necesario escribir un testamento notarial adecuado a cada individuo.
Declaración últimas voluntades
Existen numerosos tipos de testamento. Puede ser un documento dedicado exclusivamente al titular y sus bienes, o por el contrario ser las últimas voluntades de una pareja. Incluso existen testamentos grupales donde se incluyen a los amigos, que a veces son los grandes olvidados.
Lo recomendable en estos casos es dejarse guiar por profesionales que aconsejen sobre cómo elaborar un testamento. Así ocurre con los abogados, notarios y secretarias de Testamenta. Ellos le ofrecerán un primer informe totalmente gratuito para analizar su situación y el documento que más le convenga. Y en el caso de que decida contratar sus servicios, lo hará con la tranquilad de estar en buenas manos.
