El sacerdote
Francis Xavier Morgan, nació en 1857 en el Puerto de Santa María. Su padre era un galés anglicano y su madre una española llamada María Manuela Osborne.
En 1883, después de varios años de estudios bajo la supervisión del beato John Henry Newman en el Oratorio de Birmingham, se ordenó sacerdote.
Decidió quedarse a vivir en Inglaterra, pero sin dejar de visitar a su familia en el Puerto de Santa maría. Solía pasar allí los veranos y se le conocía popularmente como el «Tío Curro».
El literato
John Ronald Reuer Tolkien nació en Bloemfontein, capital del estado de Orange, hoy Sudáfrica, el 3 de enero de 1892. Cuando contaba con apenas 3 años se trasladó con su madre y su hermano menor a Inglaterra, debido a problemas de salud.
Su padre falleció y al poco tiempo su progenitora se convirtió al catolicismo, siendo fuertemente criticada por la familia que era baptista. Estas dos circunstancias, dejaron a la familia prácticamente sin recursos económicos.
Mabel, la madre de J.R.R. Tolkien sucumbió a causa de la diabetes. Cuando se leyó su testamento, se supo que había nombrado como tutor de sus hijos de 12 y 10 años y administrador de los pocos bienes que tenía, al padre Morgan.
Cruce de vidas
El sacerdote cumplió con creces la función que le encomendara la viuda, al punto de que además de ocuparse de la instrucción de los menores, aportaba pequeñas cantidades se su propio peculio, para el mantenimiento de los huérfanos.
Los parientes de Tolkien, cuentan en la actualidad que el escritor pudo estudiar gracias al dinero «del vino español», haciendo alusión a que los ingresos de Morgan provenían de las bodegas familiares en Andalucía.
Notable influencia
Gracias a los libros en español que guardaba su tutor, J.R.R. creó el naffarin, un idioma basado en la lengua castellana.
Cuando siendo un adolescente, conoció a Edith Mary Bratt y se enamoró perdidamente de ella, su tutor prohibió la relación hasta que fueran mayores de edad. Finalmente se casaron y fueron padres de 4 hijos.
Al morir Morgan, en su testamento le dejó a su pupilo J.R.R., tambien apodado «Tollers», un valiosísimo reloj que antaño había pertenecido a su padre, como muestra del gran afecto que éste le profesaba.
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Fotos gentileza de: la gaceta y wikia