La provincia de Aragón por una excepción legal y un acuerdo al respecto, tiene su propio Derecho Civil particular y especial, llamado Derecho Foral. Esta es una característica que no suele darse en otros países, donde es válido un único Código Civil para todo el territorio nacional.
Cualquier ciudadano mayor de 14 años y nacido en el territorio aragonés puede acogerse a dicho Código y tiene la oportunidad de poner todas las condiciones que quiera al hacer testamento, siempre que estas no atenten contra la ley o las buenas costumbres.
Las responsabilidades del heredero están limitadas únicamente por la herencia en sí y no van más allá de la misma, por lo que se defiende el patrimonio personal de la persona que hereda.
Para hacer testamento a menos que su presencia sea requerida por el testador, no se necesita la presencia de testigos y la legítima existe, pero fuera de esta el testador puede disponer del 50% de su patrimonio de la manera que estime conveniente.
Existe en el Derecho Foral la figura de la colación que desde el derecho romano, intenta que entre los herederos haya una cierta igualdad y que si bien se confunde con la legítima, es en sí una forma de que ésta sea lo más justa y equitativa posible.
Si un aragonés se encuentra en el exterior y lo considera necesario otorgar testamento por enfermedad o causa mayor, puede concurrir al Consulado español más próximo y acogerse al Derecho Foral Aragonés para redactar dicho documento. En ese caso el cónsul actúa como notario y es depositario del mismo.
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Foto gentileza de: aragonhoy
